Cuando me invitaron a escribir sobre la muestra pensé: ¿cómo y con qué conjugación de palabras voy a poder compartir la experiencia? Y, claro, la respuesta fue intentar traducir las sensaciones que tuve desde, con y a partir del cuerpo.
Unos días antes de la inauguración de Thesaurus visual. Posibles modos del intervalo, pasé a buscar a Guille por el Centro Universitario de Arte para tomar nuestro cafecito previo a las prácticas que estamos coordinando en la TAE. Llegué y bajé a la sala. Guille no estaba. Observé el espacio, lo recorrí, me crucé con obras embaladas, papeles desplegados, mapas y cajas. Volví a salir a la calle. A la derecha estaban manifestándose los trabajadores del Astillero Río Santiago, quienes minutos después serían reprimidos por la policía. Detrás de ellos varias personas acompañaban el velorio de Chicha Mariani, una de las Abuelas de Plaza de Mayo.
Estos acontecimientos sucediendo al mismo tiempo comenzaron a tironearme en tres direcciones. Una triangulación de fuerzas que me convocaba, que me invitaba, de alguna manera, a participar activamente. Tres escenarios con tensiones distintas: un cuerpo de lucha que se nos va, un grupo de personas exigiendo su derecho al trabajo y la construcción de un espacio como posible intervalo. Pensé, ¿qué estamos haciendo con estos hechos que día a día nos atraviesan? ¿Qué tipo de posicionamientos son posibles? ¿Cómo materializar a través de nuestro trabajo artístico la incertidumbre en la que vivimos? ¿Es realmente posible crear algún tipo de irrupción o desplazamiento en las estructuras tan duras que venimos soportando? ¿Es el arte un espacio donde rearticular nuestros cuerpos, nuestras ideas, nuestras formas de vida?
Cuento con la información de que lxs dos investigadorxs de Warburg –Federico y Guille– en los últimos días de montaje trazaron con los objetos varias coreografías para componer su Thesaurus visual. Se detuvieron en la especificidad de la materia de cada cuerpo, los movieron de un lado al otro, probaron cercanías, distancias y vacíos, casi un ensayo de una obra escénica. Lo imagino como un ejercicio de convivencia de una comunidad con sus similitudes y diferencias.
Materiales 1: una sala, relojes, luces, flores, pinturas, un video de dos personas intentado comunicarse en distintas lenguas, una maquinita que representa el movimiento de ondas, huellas de cuerpos en yeso, huesos, mariposas, frascos, colores, espejos, piedras, libros, balas, miniaturas, un telégrafo-reloj, vasijas, fotos y una palanquita que, al girarla, mueve una avispa grande que se posa sobre un parlante y produce un ruido molesto.
Materiales 2: espacios de tránsito, caminatas, detenciones, abrazos, gestos, conversaciones, pisadas, encuentros, los cuerpos: todxs esos cuerpos conviviendo.
Entrenar el cuerpo para que la danza suceda precisa de prácticas que nos permitan estar permeables, requiere de escucha y tiempo. Entro a la muestra, leo el texto. El thesaurus como procedimiento. La experiencia de la triangulación y las coreografías que imagino hicieron lxs warburguianxs preparan a mi cuerpo para la danza. Siento que puedo ser parte de este gran mapa relacional.
Observo una vitrina, entre varios objetos que hay me llama la atención un libro abierto que dice en uno de sus lados “El Espíritu de las Formas”. Debajo de estas palabras hay un papel en el que está dibujada una persona con las piernas semiabiertas con un objeto entre ellas, es el boceto de la obra de Jimena Croceri. A pocos metros de distancia se encuentra la obra, una escultura de yeso que materializa el intersticio de un cuerpo (o de dos). Este tipo de notas al pie se encuentran en toda la muestra. Voy de un lado al otro jugando a encontrar los links, sigo las líneas invisibles, a veces interrumpidas por algún encuentro con alguien –interferencia que también pienso como parte de la coreo–.
Thesaurus tiene la particularidad de no encontrarse alejada del contexto, ni escindida, ni suspendida, sino al contrario. Puede ser un buen ejercicio para trasponer este modo curatorial al presente hacer un zoom out por fuera de la sala y pensar cómo nos vinculamos con la calle, con lxs amigxs, con las instituciones, con lxs no tan amigxs, con lo ajeno, con lxs bichxs, con los objetos, con el aire y con el tiempo.